Desde entonces, tuve uno de los primeros teléfonos móviles “celulares” – me gustaría contarles una historia veloz para iniciar esta discusión.
Recuerde que las baterías de iones de litio en ese instante apenas salían de las líneas de montaje y eran bastante caras – no existían en este tamaño para nada más que para la NASA y el uso militar. Estos teléfonos celulares originales que tenía eran impulsados por hidruro de níquel, una tecnología de batería bastante inferior para los teléfonos celulares modernos.
Cuando el teléfono sonó y tocó la bocina, lo que me metió en problemas un par de veces cuando la bocina sonó mientras conducía tras un coche de policía parado en una intersección. Tengo muchas historias que contarte sobre todos esos primeros días con los primeros teléfonos celulares, y puedes enviarme un correo si alguna vez estás interesado en semejantes experiencias.
La gente actualmente da todo esto por hecho, ya que no se dan cuenta de lo complicados que eran los teléfonos celulares originales, o lo estúpidos que eran en comparación con los teléfonos celulares inteligentes de en nuestros días.
Asimismo tenía un servicio de limpieza de aviones pequeños y podía contactar a los clientes desde mi vehículo en la línea de vuelo, y mis tripulaciones podían llamarme cuando terminaban el trabajo en tanto que emplearían el teléfono público local para llamarme.
Cualquiera que tenga más de cincuenta años se da cuenta de ello, por el hecho de que recuerda una temporada en la que no había teléfonos móviles.
Como se trataba de tecnología de radio, funcionaron más que los primeros teléfonos celulares, que debían estar a una distancia de diez a quince millas de una torre celular. Hoy en día, los teléfonos celulares tienen menos vatios de lo que tenían en ese entonces, con lo que la torre celular promedio está a 6 millas o menos de distancia. En ese entonces los teléfonos celulares funcionaban con 3 vatios, y ahora con la tecnología 3G el vatiaje está bajo 1 vatio. Esto es probablemente bueno para el biosistema humano, puesto que está poniendo menos radiación de frecuencia de microondas en su cerebro, va a haber menos tumores cerebrales, cáncer cerebral y otros problemas. Ha habido muchos estudios, incluyendo múltiples con los estudiosos suizos que parecían señalar que los teléfonos de tres W eran bastante inadmisibles para la salud humana, y que poco a poco cocinarían su cerebro como afirmó un investigador.
De hecho, si usted va a Google Scholar actualmente se le va a hacer difícil localizar algo que sugiera que los teléfonos celulares podrían ocasionar condiciones tan terribles. Naturalmente, todo esto sigue siendo objeto de discute, pero procuramos no hablar de ello.